martes, mayo 31, 2011

PEOR QUE LAS FOTOS

“Nebreda consigue negarse absolutamente y plasmar esta auto-negación como obra de arte”
Jean Baudrillard





David Nebreda (1952). A los 19 años fue diagnosticado de esquizofrenia, hace años que ha renunciado a cualquier medicación, lleva una vida absolutamente aislada, no sale de su casa de dos habitaciones, no ve la televisión ni lee periódicos, no mantiene contacto social con absolutamente nadie y estuvo internado en clínicas psiquiátricas. Es vegetariano desde hace treinta años, practica el ayuno, la abstinencia sexual y se somete a extenuantes ejercicios físicos.



Con una técnica fotográfica impecable, donde el tratamiento de las formas y de la luz resaltan por su originalidad, sus autorretratos son casi lo único que conocemos de él. Encerrado en su casa en Madrid, España, durante veinte años, sin mantener relación con ninguna otra persona y sufriendo ayunos severos que le han mantenido en un estado de máxima delgadez, ha torturado su cuerpo al mismo ritmo que la esquizofrenia ha martirizado su mente. La cámara fotográfica ha sido fiel testigo de las autotorturas que ha llevado a cabo sobre su propio cuerpo de forma tan salvaje como ritual.





Excelente dibujante, tanto cuando maneja el lápiz como cuando emplea a modo de tinta su propia sangre: las figuras están muy bien encuadradas, el trazo es seguro y limpio, y todo ello nos permite considerarlo como un heredero aplicado de la tradición académica notandose su licenciatura en Bellas Artes



Como fotografo autodidactico la obra de Nebreda muchos criticos la dividen en cuatro etapas diferentes. En primer lugar, están sus autorretratos en blanco y negro realizados entre 1983 y 1989; en un segundo bloque se incluyen los realizados entre 1989 y 1990; en tercer lugar los que llevó a cabo en 1997 y, por último, los que desarrolló en 1999. A excepción de los primeros, todos los demás son en color. Para la realización de sus retratos ha utilizado sus propios excrementos, orina, sangre, espejos, automutilacion, símbolos religiosos e iconografía masónica. Nebreda: "He pagado mi precio, pero estoy orgulloso de ello. No soy un masoquista o un fotógrafo de heridas. Mi propia realidad es peor que las fotos".




Sus imágenes fueron a parar a manos del galerista Renos Xippas quien le dedicó una exposición en su local de París; donde el sociólogo Léo Scheer vio su obra y decidió hacerse editor para divulgarla, escribiendo ademas dos libros en los que recoge, además de sus fotografías, dibujos y escritos del artista, sendos artículos de especialistas.



Su obra consiste en series y series de autorretratos. Pinta con su propia sangre, y utiliza sus propios excrementos.



Una de sus obras más conocidas es la de su rostro cubierto por excrementos, que acumuló durante tiempo en su nevera con ese fin.



La exposición individual que se le dedicó en París en el 2000 lo dio a conocer al mundo.

2 comentarios:

Celeste dijo...

Todos somos un poquitos todos.

Beso celeste.

H.R.Cuenya dijo...

Ojala!!!